miércoles, 29 de agosto de 2007

En la Ciudad Prohibida

La ultima visita que hice en este viaje fue -hoy por la manana- a la enorme, magnifica y sorprendente Ciudad Prohibida. Patrimonio de la Humanidad, en este complejo de palacios vivieron durante 500 anios los ultimos emperadores de China, pertenecientes a las dinastias Quing y Ming. Cuando vino la revolucion, evidentemente, los emperadores fueron expulsados y se instauro la Republica Popular China, aunque las autoridades usan otras instalaciones, mas acordes a la estetica austera de un partido comunista y no tan exhuberantes como estos palacios.

Debo reconocer que mi visita estuvo condicionada por dos factores: el aplastante calor (casi 40 grados), y la interminable e insoportable marea de turistas, principalmente chinos. Ademas, no puedo negar que estoy empezando a sentir el agotamiento de tantos dias de idas y venidas, de trenes, buses, muchedumbres, dormir en el suelo o en duros colchones, y otros tantos etceteras que forman parte de un viaje de estas caracteristicas.

Para evitar las enormes colas que esperan la apertura de las boleterias, me levante a las 6 de la manana. Llegue a las 7 y 15, sin embargo ya habia gente esperando. Y a las 8 y media en punto abrieron las puertas. Cada palacio del complejo tenia diferentes funciones. En uno, por ejemplo, el emperador se cambiaba de ropa. Otro era usado para recibir a las visitas. En un palacio contiguo desfilaban las mujeres que irian a formar parte del "haren" del emperador. Ademas, cada recinto tiene nombres que me parecieron muy poeticos, como el Palacio de la Tranquilidad Terrenal, el Salon de la Pureza Acumulada, la Puerta de la Unidad Celestial o el Palacio de la Benevolente Tranquilidad. El calor y la multitud eran tal que, cuatro horas despues de entrar, solo queria irme de alli. Fui a comer a un restaurante (chino, claro) que tenia un cartel que decia "All you can eat". Y no comi lo que pude, sino lo que me permitio el terrible picante que le metian a la comida...

La Puerta de la Suprema Armonia.


Frente al Salon de la Armonia Central.


Detras de esta pareja hay dos cipreses entrelazados que, segun la leyenda, representan el amor leal y eterno. Los dos ultimos emperadores, despues de la boda, se hicieron una foto delante de estos arboles, foto que aun se conserva.


Un mendigo tocando musica tradicional con un instrumento tipico, cerca del hermoso y agradable Parque Ritai, ayer por la tarde.


El atestado metro de Beijing. Para mi sorpresa, esta muy bien ordenado y senializado, los carteles en chino y en ingles, y es muy facil encontrar la estacion deseada (todo sea por los Juegos Olimpicos).

1 comentario:

Anónimo dijo...

cuando te digo chino chino
chino del alma!
tu me contestas...
chinita de amol!
vao